viernes, 18 de agosto de 2017

¿RIOJA O RIBERA?

Nada más sentarnos para cenar en un restaurante, nos atiende una camarera,
-Para beber, ¿que desean?
-Para mí una copa de vino tinto.
-Para mí, igual.
-¿Rioja o Ribera?
Es una canción que me sé de memoria, y vacilo antes de contestar.
-Para mí, Ribera.
-Para mí, Rioja.
Al poco tiene lugar la segunda parte del rito. La camarera aparece con sendos vasos de vino tinto y los deposita, señalando:
-Ribera para la señora, Rioja para el señor.
Tomamos un sorbito inicial y cruzamos mirada. ¿Rioja, Ribera...? Cuando ella lo dice...
Podríamos haberle solicitado previamente:
-Tráiganos por favor las botellas para ver las etiquetas. Pero no, ¡eso sería ofensivo!. Sería mostrar desconfianza. ¡Estúpido conformismo!

No hay comentarios:

Publicar un comentario